2012-03-11 INFINITO
Mis piernas y mis brazos tienen fin,
mis riñones, los pelos de mi barba,
mis tardes en el campo,
inclusive mis penas y esperanzas...
Pero mi anhelo es infinito.
Pedro Casas Serra
Poesía intimista
2012-03-11 INFINITO
Mis piernas y mis brazos tienen fin,
mis riñones, los pelos de mi barba,
mis tardes en el campo,
inclusive mis penas y esperanzas...
Pero mi anhelo es infinito.
Pedro Casas Serra
2012-03-05 LA ARQUEOLOGÍA
En Atapuerca
se han encontrado restos
que confirman
que nuestros bisabuelos
se comían entre ellos.
Y en el nevado Ampato
la momia de Juanita
ofrecida a los dioses.
Y la de Ötzi, en los Alpes,
muerto por una flecha
hace cinco mil años...
La arqueología es una ciencia
muy curiosa.
Pedro Casas Serra
2012-03-04 ELLA HABLA
Martes de Carnaval,
pasa la rúa
y con ella, mezclados,
gigantes, cabezudos,
carrozas... un gentío
con diferentes ropas
y antifaces.
- Detrás de mi mirilla
voy desapercibida:
supermanes, princesas,
bailarinas, toreros,
sacristanes...
Yo con mi soledad,
ellos contentos.
Pedro Casas Serra
2012-02-25 EN MI ESCALERA AL CIELO…
En mi escalera al cielo,
mamá en un principio,
Milagros en medio
y Celia al final.
"En la toalla con que me abrazabas, cabemos los dos."
"Como mi pájaro, tú no has muerto, que en un descuido volaste al cielo."
"Porque tenemos mucho que hablarnos, hemos de proseguir esa conversación entre los dos."
Pedro Casas Serra
2012-02-22 UN PÁJARO
A Ramiro Deladanza
Un pájaro nos despertó con su trino desde la copa de un árbol.
Un árbol con un pájaro: desde la copa nos despertó su trino.
Desde un pájaro de un árbol con su copa, nos despertó su trino.
Con la copa de su trino nos despertó desde un árbol un pájaro.
Con su trino, un pájaro desde un árbol nos despertó la copa.
Un trino desde la copa de un árbol nos despertó con su pájaro.
Nos despertó con su trino un pájaro desde su árbol: ¡la copa!
Pedro Casas Serra
2012-02-08 EL ORIGEN DEL FUEGO
Atenea reinaba en el Parnaso
cuando llegó a su trono Prometeo.
- Diosa inteligentísima - le dijo -
el mundo está poblado por entero
de animales mortales. De sus alas
están dotados unos para el vuelo,
otros de gruesas pieles con que evitan
el aire frío cuando el crudo invierno,
de garras otros y afilados dientes
con que poder lograr el alimento...
Ellos solo han quedado desvalidos:
se llaman hombres y mucho me temo
- desarmados, desnudos y descalzos -
que pronto morirán si no han remedio.
- Ven esta noche y sigilosamente
unas brasas retira del Gran Fuego.
Eso hizo Prometeo y desde entonces
- ¡fijaos bien si no ha pasado tiempo! -
los humanos, por gracia de Atenea,
progresamos, vivimos y crecemos.
Pedro Casas Serra
2012-01-31 EL CASTIGO DE TIRESIAS
Tiresias, Profeta divino, Augur infalible:
¿Cómo reconoceré a las vacas sagradas para no sacrificarlas?
¿Cómo conseguiré llegar a Ítaca?
¿Cómo eludiré la muerte desde el mar?
-¿No te he dicho, Ulises, que yo puedo adivinar el futuro
pero no evitarlo? Conocer el futuro es inútil
si igualmente te alcanza sin remedio. ¿No crees que de haber sabido
que contemplar a Atenea desnuda en su baño me produciría la ceguera,
no hubiera huido del agua clara y de su dulce voz?
¡No remuevas mis huesos en su tumba! ¡Es horrible saber
aquello que solo trae desgracia a quien lo sabe!
El anciano Tiresias dejó de usar la palabra “tal vez”
y empezó a usar la palabra “casi nunca”
en el climaterio de su vida. En aquel tiempo
brillaban más las estrellas en el cielo.
Pedro Casas Serra